Vengan y vean

Al grito de "vengan y vean", un actor de circo invitaba a los transeúntes a acercase y ver el espectáculo que se ofrecía, algo único, nunca visto, raro y fuera de lo común. A este tipo de "funciones" los seres humanos estamos acostumbrados, prácticamente hoy por medio de la publicidad, y del "marketing" somos invitados a ver, y creer en todas las teorías, propuestas, y mercancías de lo más variopintas....sin que algo o alguien nos atraiga, podríamos incluso pasar sin percibir lo que nos rodea, el intelecto, y el alma del hombre esta tan embotado que casi nada, literalmente, nos llama la atención. Por esto de día en día el hombre busca y se inventa o reinventa todo para atraer al menos por 20 segundos la atención de alguien. En el Evangelio de San Juan, capítulo 12, 32, nuestro Señor dice: "Cuando sea elevado sobre la tierra, atraeré a todos a mi" y todos los Padres de la Iglesia han coincidido en que se refería a la forma en que moriría, pero igualmente a que nada ni nadie pasaria sin percibir el gran misterio de la fe: Cristo crucificado.

Ante esta verdad histórica, hay también una verdad mística: Cristo ha venido a salvar a los hombres dádose el mismo como "pago" a la deuda original por el pecado del ser humano, pero ese "pago" no tiene valor para los hombres, si ellos no se unen voluntariamente a Él, es decir es vana la Cruz y el sacrificio de Cristo si los hombres no conceden su aceptación de Cristo como Señor y Salvador de sus vidas. Esta verdad, a veces poco comprendida como esencia del cristianismo, necesita que al menos sea comprendida en los 20 segundos de la atencion del hombre de hoy. La Cruz por tanto no es un objeto histórico, decorativo o tradicional, sino una auténtica acta de pacto, entre Dios y los hombres, asi como un dia lo fué el arcoiris en tiempos de Noé, asi la Cruz nos recuerda que Dios estableció que su propio Hijo, nacido de una Virgen, y sometido bajo la ley, uno como nosotros, en todo igual, menos en el pecado, se dé como prenda y sacrificio.
Estamos claros todos en que nuestro Padre Dios no es un Dios Molok al que se sacrificaban vidas humanas para calmar su sed de sangre, sino un Padre amoroso que envia al primogénito de todas las criaturas, para que siendo él el primero en todo, sea tambien el primer victorioso de la muerte y por su obra salvífica, conceda vida a los que estaban (y quizá aún estamos) en los sepulcros. Que en sí mismo no eran los muertos de antaño, ni los muertos de hoy, sino la vida sin Vida de un mundo descristianizado.
Hoy es más que nuevo el mensaje de la Santa Cruz, no es un mensaje válido solo para las abuelitas, o para aquellos que con lágrimas suplican perdón, sino tambien para aquellos que estan sanos, ricos, o felices en esta vida, para todos, no solo para los desesperados, pobres, o enfermos. Es por sobretodo mensaje re-creador de la naturaleza humana, pues como creemos en la Ortodoxia, todo es renovado en El y para El.

Por tanto, la Cruz que hemos celebrado el Domingo pasado, con procesión, veneración y entrega de albahaca, nos deja el mensaje de autoevaluar en nuestra vida si estamos verdaderamente unidos a Cristo, os recuerda el profundo amor de Cristo, y nos hace de signo de reconciliación con Dios. Como Ortodoxos repetimos decenas de veces durante la Divina Liturgia, y durante nuestro dia la Señal de la Cruz sobre nosotros, y la damos a conocer a todos y en todo. No debemos avergonzarnos de usarla. "Porque la predicación de la Cruz, es locura para los que se pierden, pero es fuerza de Dios para los que se salvan."(1 Cor 1,18). Gritemos con la fuerza de los locos por Cristo.....Vengan y vean!!!, que la Santa Cruz fue instrumento donde Cristo nos redimió, y su Santa Resurreción nos glorificará.