Haced todo para la Gloria de Dios (VII)

“¿Cómo se debe recibir el Antidorón

al final de la Divina Liturgia?”

El Antidorón (o Eulogia, como se lo llama en algunas Iglesias) es el Pan Bendito que el Sacerdote distribuye a todos los fieles al final del Servicio o Divina Liturgia, cuando nos acercamos a venerar la Santa Cruz y recibir la bendición del Sacerdote.

En cada Divina Liturgia, cinco panes, (que llamamos Prósfora del griego significa ofrecida) son ofrecidas en el servicio llamado proskomedia o preparación. Uno de estos panes ha sido usado para tomar de allí el “Cordero” o porción que será santificada para la Santa Comunión, es decir será trasmutada por la gracia del Espíritu Santo en el Cuerpo de nuestro Señor y dado en comunión. De las otras cuatro prosphoras, se realizará una memoria o conmemoración de la Madre de Dios, de los Santos, de los Fieles y de los Difuntos durante las oraciones de la Proskomedia. Lo que no es usado para estas conmemoraciones se corta y coloca en recipiente aparte y se pide durante el canto de “Es justo en verdad magnificarte Madre de Dios..” que la Santa Theotokos desde el cielo y presente durante la Divina liturgia bendiga este pan para darlo a los fieles como su regalo.

El termino “Antidorón” significa “en lugar de lo regalado” y para los cristianos durante la Divina Liturgia Dios se regala a los hombres, por esto deben ellos tener una preparación adecuada y ser dignos. En Lugar del precioso regalo de la Eucaristía, antiguamente se daba este “Antidorón” como una consolación para ser llevada a quienes no pudieron asistir, o para aquellos que no estaban debidamente preparados para comulgar, con el paso de los años también aquellos que comulgaron dignamente lo recibían para tener una comida bendecida, después de la Santa Comunión, pues no deseaban alimentarse con algo indigno después de comulgar. Entonces, para que lo tengamos claro, el Antidorón o pan bandito no es un substituto de la Santa Comunión, pero si es un pan bendecido que no es vulgar o común. En algunas Iglesias sobretodo rusas, se lo come dentro de la iglesia junto con algo más de vino que se coloca en una mesa. Al ser como un alimento que nos ayuda a “cubrir” los Santos Dones comulgados, también desde los primeros siglos apareció la costumbre de tomar una porción inmediatamente después de comulgar los Santos Dones junto con un poquito de vino sin consagrar.

La forma correcta de recibir este regalo de manos del Sacerdote es: Colocar la palma de la mano derecha sobre palma de la izquierda haciendo como un recipiente donde con reverencia recibimos esta bendición, mientras nos acercamos al sacerdote, besamos la Santa Cruz que el nos acerca con su mano izquierda y mientras el Sacerdote nos entrega el Antidorón en nuestras manos cruzadas con su mano derecha besamos su mano.

Es muy importante entender que el Antidorón no es un pan común, aunque tampoco es la Santa Comunión, pero no debemos dejar caer partículas de el por el suelo y comerlo totalmente. NO es correcto comerlo mojándolo en el café u otra bebida que se ofrece después de la Liturgia.